A lo largo del libro no todo es deporte, y uno de los objetivos de esa otra parte era dar a conocer una enfermedad rara, la FIBROSIS QUÍSTICA (pincha en la imagen para conocer más).
¿Por qué? Pues porque es de esas enfermedades que, precisamente por raras, no se conocen a menos que te pillen de cerca. Mi desconocimiento terminó desde el mismo momento en que entró en mi familia, por eso en el libro cobra cierto protagonismo a través de alguno de sus protagonistas, una por padecerla y otros por querer ayudar y dar visibilidad, algo vital para integrar y no perjudicar a quienes padecen esta y otras enfermedades tan poco comunes que mal llamamos "raras".
Todo suma, y por eso he querido que el libro mencionase la iniciativa #DONANTESDEGANAS (pincha en la imagen para más info), más si cabe en estos tiempos de una pandemia que hace mucho daño a los enfermos de FQ, quienes, por cierto, ya tenían que tener las precauciones que ahora tanto nos molestan a los que creemos estar sanos y ser inmunes (mascarilla, higiene de manos, distancia social...). Ser seres sociales no significa estar de fiesta permanente, de hecho, está más relacionado con ser lo suficientemente responsables como para saber que la libertad individual termina donde empieza la del prójimo y, respetando eso, demostramos ser seres sociales. ¡Vamos!, que visto lo visto, cumplimos más con el dicho de que "la avaricia rompe el saco", ese que nos vuelve a inundar con nuevas restricciones que nos hemos ganado por no entender que "nueva normalidad" no es "vuelta a la normalidad".
Y aunque en el libro no aparece, todo afán por dar a conocer este tipo de patologías solo ayuda a normalizar esas situaciones que nos hacen mirar a la gente "raro" por ver cosas que no son del todo comunes. Recuerdo también la iniciativa de #NUNCANOPUEDO o #REVUÉLCATE (pincha para más info) en las que tuve el placer de poner mi granito de arena, muy pequeño. Consistió en hacer el Camino de Santiago haciendo girar una rueda de tractor. ¿Tontería? Solo ver la gente que se acercó en el Obradoiro a ver qué se cocía en torno a esa rueda bien mereció la pena la locura.
Como bien dicen muchos de los que padecen esta enfermedad, "tú respiras sin pensar, yo solo pienso en respirar". Tan sencillo y tan duro al mismo tiempo, más si cabe en este periodo marcado por el omnipresente COVID-19.
De nuevo, otra dosis de realidad dentro de la novela, cruda, pero realidad. Lo peor, que no sé si estamos aprendiendo todo lo que debemos de esta realidad que nos ha tocado vivir, los personajes del libro, demostraron ser mucho más inteligentes respecto a esta patología, y no necesitaron una pandemia para concienciarse.
#delamontañaalagloria
#MVP
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